La empresa Ashley Madison, dedicada a facilitar encuentros entre hombres y mujeres casados, ofrece tres millones por aparecer en la camiseta rojiblanca
La camiseta del Atlético sigue huérfana tras la marcha de KIA, patrocinador las últimas temporadas. Y en ese compás de espera, salen a la luz ofertas y posibilidades de todo tipo. Y en ese todo tipo encaja la última en salir a la luz. Se llama Asley Madison. Hasta ahí todo más o menos normal. El pequeño lío viene al intentar explicar a qué se dedica la empresa. Algo que podría intentar explicarse a través de la siguiente frase: "Papá, ¿por qué engañas a mamá?".
Dicho así igual no suena mucho, de hecho no suena a nada, pero el resumen es el siguiente: es una empresa que se dedica a facilitar, a través de internet, encuentros entre hombres y mujeres casados. Obviamente, encuentros no con sus respectivos maridos y esposas, si no con las de otros y otras. Total, que se trata de una agencia para ser infiel. La compañía, creada en 2002, se hizo famosa en España hace unas semanas porque no se le ocurrió mejor cosa que colgar un cartel en plena Gran Vía de Madrid con las fotos de Carlos de Inglaterra, Bill Clinton y S. M. el Rey Don Juan Carlos. "¿Qué tienen en común estas realezas?", se preguntaba, y se respondía: "Tenían que haber utilizado Ashley Madison". El cartel fue retirado, y ahora intentan utilizar al Atlético de Madrid para recuperar notoriedad.
La oferta, recibida en el Vicente Calderón vía burofax el pasado día 19, llega a los tres millones de euros anuales por las próximas tres campañas, aunque desde la empresa insisten en que podrían aumentar la oferta. El Atlético, por su parte, todavía considera la operación en pañales.La camiseta del Atlético sigue huérfana tras la marcha de KIA, patrocinador las últimas temporadas. Y en ese compás de espera, salen a la luz ofertas y posibilidades de todo tipo. Y en ese todo tipo encaja la última en salir a la luz. Se llama Asley Madison. Hasta ahí todo más o menos normal. El pequeño lío viene al intentar explicar a qué se dedica la empresa. Algo que podría intentar explicarse a través de la siguiente frase: "Papá, ¿por qué engañas a mamá?".
Dicho así igual no suena mucho, de hecho no suena a nada, pero el resumen es el siguiente: es una empresa que se dedica a facilitar, a través de internet, encuentros entre hombres y mujeres casados. Obviamente, encuentros no con sus respectivos maridos y esposas, si no con las de otros y otras. Total, que se trata de una agencia para ser infiel. La compañía, creada en 2002, se hizo famosa en España hace unas semanas porque no se le ocurrió mejor cosa que colgar un cartel en plena Gran Vía de Madrid con las fotos de Carlos de Inglaterra, Bill Clinton y S. M. el Rey Don Juan Carlos. "¿Qué tienen en común estas realezas?", se preguntaba, y se respondía: "Tenían que haber utilizado Ashley Madison". El cartel fue retirado, y ahora intentan utilizar al Atlético de Madrid para recuperar notoriedad.
"Sabemos que quieren negociar, pero todavía no hemos hecho nada, y desde luego no vamos a regalar el espacio en la camiseta", afirmaban fuentes del club. Se refiere a que la oferta inicial, de tres millones, está muy lejos de los nueve fijos más incentivos que pagaba KIA, la marca de coches coreana, que abandonó el patrocinio el pasado 30 de junio. En el club no esperan llegar a esa cifra, pero sí barajan los seis millones como algo aceptable. Ocurre que no hay muchas opciones, pues quitando unas negociaciones con Turkish Airlines hace un par de meses, no ha habido acercamientos serios con ninguna compañía.
Desde la empresa especializada en cuernos –suena feo, pero es lo que hay– afirman haber recibido ya las llamadas del gerente, Clemente Villaverde, y del nuevo director comercial, Guillermo Moraleda, interesándose por la posibilidad de negociar, aunque esto el Atlético no lo confirma. El club, que siempre presume de innovación en sus estrategias comerciales, daría así otro paso en un camino donde, al margen del anuncio del padre y el niño, se le recuerda mucha presencia en los medios gracias al Mono Burgos y su salida de la alcantarilla o a los dos soldados de la Guerra Civil que terminan haciéndose amigos gracias al Atleti.
Mucho más extraño resulta explicar los acuerdos que mantiene hoy en día con equipos a cual más difícil de pronunciar. Shanghai Shehua (China), Muangthong United (Tailandia), Al Ain (Emiratos Árabes) y el Raja Club de Casablanca (Marruecos). El club siempre ha vendido estas alianzas como caminos inexplorados por el fútbol. Si es por eso, también va a conseguir que la frase "Cariño, me voy al fútbol", adquiera desde hoy un significado mucho más sospechoso. "Ya, ya, al fútbol...".
Extraído de El Mundo (Eduardo J. Castelao)
Desde la empresa especializada en cuernos –suena feo, pero es lo que hay– afirman haber recibido ya las llamadas del gerente, Clemente Villaverde, y del nuevo director comercial, Guillermo Moraleda, interesándose por la posibilidad de negociar, aunque esto el Atlético no lo confirma. El club, que siempre presume de innovación en sus estrategias comerciales, daría así otro paso en un camino donde, al margen del anuncio del padre y el niño, se le recuerda mucha presencia en los medios gracias al Mono Burgos y su salida de la alcantarilla o a los dos soldados de la Guerra Civil que terminan haciéndose amigos gracias al Atleti.
Mucho más extraño resulta explicar los acuerdos que mantiene hoy en día con equipos a cual más difícil de pronunciar. Shanghai Shehua (China), Muangthong United (Tailandia), Al Ain (Emiratos Árabes) y el Raja Club de Casablanca (Marruecos). El club siempre ha vendido estas alianzas como caminos inexplorados por el fútbol. Si es por eso, también va a conseguir que la frase "Cariño, me voy al fútbol", adquiera desde hoy un significado mucho más sospechoso. "Ya, ya, al fútbol...".
Extraído de El Mundo (Eduardo J. Castelao)
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