Este es el compromiso que ha expresado el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, en la que ha asegurado que por parte del Ayuntamiento "no hay ningún tipo de rigidez" sino que "hay toda la flexibilidad del mundo" en este asunto.
El alcalde ha señalado que se realizó un estudio previo a la autorización de los lugares de ubicación pero que "una cosa es estudiarlo sobre el papel y otra ver el impacto, el efecto que una vez instalado el soporte publicitario tiene en relación al comercio, a la vivienda o al paisaje urbano" en general.
Por eso, el Consistorio estudiará todas las propuestas de revisión que se le formulen, tanto si proceden de "una iniciativa ciudadana que considere que no es el lugar adecuado para su instalación" como de lo que aprecien los inspectores municipales, y "en caso de que proceda se modificará la ubicación".
No obstante, Ruiz-Gallardón ha indicado que "Madrid es una de las ciudades que menos espacio dedica a la publicidad de las grandes capitales europeas, incluso de las grandes capitales españolas".
Extraído de El Mundo
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